miércoles, 31 de mayo de 2017

MAÑANA A LAS TRES





Hoy recuerdo con mucha nostalgia
aquel bello amor de principiante,
la que una vez me dio su alegría,
aquel amor sincero de estudiante.

Felices en la tierra nuestras almas vivían,
con miedo a que murmuren de nuestro amor,
de ese amor sincero que muchos no entendían,
pues hoy al recordarlo me lleno de dolor.

Amor de estudiante, amor de besos sinceros,
de entrega y sacrificio que tú me supiste dar,
quedamos aquella tarde encontrarnos allá lejos,
buscando un escondite para podernos amar.

Aquella tarde, tus manos acariciaron las mías,
y mirando al cielo - solo tú, mi amor- me dijiste,
hoy guardo en silencio todas mis alegrías,
y puedo hoy decir que en verdad sí me quisiste.

La cita estaba hecha y a las tres era la hora,
más yo llegar no pude, así estaba hecha la historia,
esperándome te hallabas sentada en el cinema,
es el dolor más grande que llevo en mi memoria.

Yo jamás pude verte ni decirte que te amaba,
tus ojos se cerraron sin ver caer mis lágrimas,
aquella tarde de mayo en el cine Primavera,
Dios quiso hacer tu tumba y sitio de mis penas.

Amor hoy te he llorado recordando aquella cita,
aquel encuentro que no pude llegar aquella vez,
pues siento en mis noches que tu alma resucita,
y me dice – amor no olvides, mañana a las tres.

Terremoto de mayo, qué triste es mi historia,
pues perdí aquella tarde, a la mujer más hermosa,
hoy solo puedo decir, que vive en mi memoria,
así como en mi jardín, creciendo va esa rosa.

Chimbote, 31 de mayo de 1970

No hay comentarios.: