Algún día cuando todo se termine,
mis
labios pronunciaran tu nombre,
y
al hacerlo la opaca tarde lloverá,
porque
perderás en la vida un gran hombre.
Quizás
al pasar el tiempo, te digan que fui bueno,
que
entre todos mis amores, tú fuiste la elegida,
pero
ya es tarde mujer, en esta vida todo se acaba,
pero
la fe y la esperanza aún me queda.
No
morirá mi amor por lo sucedido,
aunque
mis ojos lloraran tu despedida,
daré
vuelta atrás para ver si has partido,
y
si dejaste mi corazón en tu partida.
Tú
me dirás que poco te he querido,
yo
te diré, te amé con demasía,
pero
si marcharte tú has preferido,
culpable
eres tú y tu ironía.
No
volveré a sentir ya tu fragancia,
que
cada noche a mi lado compartías,
estarás
lejos de mí, sin mi alegría,
yo
lejos de ti como cualquier día.
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