Te acuerdas amor de la noche aquella,
cuando bajo palmeras mi amor te ofrecía,
mas tú muy orgullosa esquivando tu alegría
me dijiste amor… que noche tan bella.
Te acuerdas que al coger tus tiernas manos.
puse entre tus dedos un par de anillos,
te dije – es para ti amor- y luego entre abrazos
sentí tu ternura, tu calor y luz en tus ojos.
Ellos fueron testigos de nuestro gran amor,
anillos de ternura y llenos de esplendor,
anillos que sellaron mis penas y mi dolor
fueron ellos los que me hicieron un gran señor.
Hoy al recordar todo aquello con ternura,
y veo realizado mis sueños en pasión,
te digo que no puedo olvidar tu hermosura,
ni la noche aquella que vivió mi corazón.
Hoy esos anillos son nuestros carceleros,
de aquel amor que nació en una primavera,
hoy solos tu yo junto a unos candeleros
recordando la noche de nuestra quimera.
Es un amor de encanto y de gran ensueño,
y nuestros anillos de amor allí prendidos,
esa noche amor recién pude ser tu dueño,
y nuestros anillos fueron los testigos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario