Llegaste a mí
cuando más te necesitaba,
trayendo
entre tus manos el amor que no conocía,
mis mañanas
cambiaron porque también te amaba,
eras tú mi
ilusión y el ser a quien más quería.
El tiempo
transcurrió llenándome de pasiones,
el manto
oscuro del desamor voló a otros lares,
fuiste mi
inspiración, la nota de mis canciones,
fuiste la
luna que me acompañó por siete mares.
Tu belleza
angelical a mi alma seducías,
haciéndome
convertir en Dios y soberano,
y las noches
de placer en que tú vivías,
me hicieron sentir
en un ser sobrehumano.
Pero este
amor lleno de promesas y encanto,
fue robado
por una noche de martirio,
hoy tú no estás,
mi ser esta vestido de llanto,
esperando que
vuelvas esta noche de delirio.
Porque aunque
estés lejos, cerca de mí estarás,
y te buscaré
en una estrella fugaz de esta noche,
para
envolverte en mis sábanas frías y mía serás
como ayer y
como siempre amor sin reproche.
Bendito amor,
de pasión vivido eternamente,
no tardes en
volver por el amor que juraste,
aún resuena
en mis oídos tu voz dulcemente,
pero no
tardes en volver, si alguna vez me amaste.
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