La
vida una mañana me presentó a ti,
venias
sonriendo, mirando no sé qué,
te
dije - hola, quisiera conversarte algo de mí,
decirte
muchas cosas, decirte que te amo-
Y
tú a mi pedido no te guardaste el miedo,
también
yo soy casada, pero te miraba a ti,
lléname
de besos, haz que llegue el olvido,
no
sabes amor mío, que también sufría por ti.
Lléname
de ilusiones amor en mi camino,
vísteme
de blanco esta noche de amor,
hazme
tuya, hazme feliz amor divino,
que
nunca vuelva a mi lado el dolor.
Hoy
que todo ha terminado porque así lo quisiste,
siento
que en el alma te quiero aún todavía,
tú
sigues olvidando por quien tanto sufriste,
hoy
entiendo que no puedo vivir esta agonía.
Mi
sueño había sido vivir siempre a tu lado,
llenarte
de caricias y mil besos también,
pero
llego la suerte impía y se fue acabando,
aquel
amor divino, aquel amor de bien.
Hoy
dices que tú ya me has olvidado,
creerlo
es muy difícil y no puedo entenderlo,
aunque
ahora niegues que tú no me has amado,
no
olvides que fuimos amantes y porque
negarlo.
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