TÚ HAS DE LLEGAR

Bebiendo estoy este trago amargo,

en aquel mar que yo te conocí,

es tan inmenso y es tan largo,

que yo no sé si volverás por mí.

 

Llega la noche y amanece el día,

y sigo yo pensando que tú has de volver,

que te llevaste mis besos y mi alegría,

y me quede sola, sola sin tu querer.

 

El tiempo pasa y el silencio habita,

el mar esta calmado, no es el mismo de ayer,

siento que tú llegas y mi alma se agita,

vuelve te lo pido no te quiero perder.

 

Solo el recuerdo habita en estas tranquilas playas,

aquellas que hoy se encuentran muy tristes y calladas,

yo salgo siempre en tu búsqueda todas las mañanas,

y mirando al horizonte, se me caen las lágrimas.

 

Pero yo sigo creyendo en tu regreso,

y una copa más acompaña mi triste soledad,

llega la tarde y hasta tengo miedo el ocaso,

porque espero que llegues con mi felicidad.

 

Pero te sigo esperando mirando las estrellas,

de nuestra última noche que pasamos junto al mar,

hoy tan solo son recuerdos esas noches bellas,

porque tengo la esperanza que tú has de llegar.

ALGUIEN ME PODRÁ AMAR

Hoy déjame decirte todo lo que siento,

después de aquel día en que tu partiste,

mi vida tuvo un cambio, me llené de lamento,

pues no pude entender si amarme me dijiste.

No existió motivos para nuestra ruptura,

tus celos enfermizos acabo con el amor,

no entendiste que amar es cosa dura,

que amar también es vestirse de dolor.

Pero seguiste tú en tu camino,

deshojando rosas sin ser primavera,

te deje ir sabiendo que el destino,

algún día acabaría con mi espera.

Hoy que he vuelto de nuevo a recordarte,

y he llamado muchas veces a tu corazón,

me dice que has preferido olvidarme,

y que nunca me amaste fui amor de ocasión.

Esa pena es la que aún me atormenta,

la que me tiene envuelto entre llamas,

tantas noches compartimos esas sábanas,

hoy soleadas buscan de nuevo nuestras almas.

Pero no estás, con tu capricho te fuiste,

abrigas otro sueño y tal vez otra ilusión,

pero vivo pensando si así me quisiste,

mi corazón me dice: no le des el perdón.

Por eso es mejor que de mí te olvides,

y de todas aquellas tardes junto al mar,

para mi corazón en verdad ya no existes,

déjame solo, ¿que alguien me podrá amar?.

Autor: Federico Mendo Sánchez

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PERÚ

YA TE PERDÍ

Yo quiero que tú sepas que he vuelto a recordarte,

de aquellos buenos años que pase junto a ti,

cuando tu viajabas y yo loco por hallarte,

hoy tú vives muy feliz y yo vivo sin ti.

Me pregunto una vez más, si aquello fue amor,

porque hoy has decidido dejarme solo a mí,

promesas incumplidas que hoy me llenan de dolor,

no contestas mi llamado, y yo sigo sin ti.

Nuestra primera noche, acaso has olvidado,

penurias que pasamos, en esa noche de amor,

viniste desde lejos buscando al ser amado,

más hoy te has olvidado, muriendo estoy de dolor.

Los años de tu infancia mis manos recorrieron,

tus noches de emociones lo hiciste junto a mí,

amores que tuviste de nada te sirvieron,

dijiste que me amabas y hoy estoy sin ti.

Recuerda aquella tarde en que tú me esperabas,

estabas muy nerviosa, muchos años habían pasado,

te busqué muy presuroso y con tu mano me llamabas,

creí que tú me amabas, pero fue un amor simulado.

Fue pasión lo que vivimos, pero yo sí te amaba,

y fuiste tú mi musa, aquella noche llena de candor,

pero todo tiene su fin y todo en esta vida se acaba,

yo nunca te deje de amar, hoy vivo mi gran dolor.

Quisiera yo olvidarme, del día en que te conocí,

eras muy tierna mujer, llena de amor y de encanto,

pero de que vale recordarlo, porque yo ya te perdí,

anda nomás con tu orgullo, deja a mis ojos su llanto.

SOLO PARA TÍ

Se estremece mi cuerpo tan solo al recordarlo,

aquel día de verano en que tú llegaste,

casi silenciosa como queriendo negarlo,

de aquel tiempo pasado en que tú me amaste.

 

Yo no comprendía porque tanto encanto,

tus ojos cerraste al ver mi cuerpo desnudo,

yo no sé si fue horror o te causé espanto,

pero mi boca ardiente dominarse no pudo.

 

Mis labios ardorosos callaron pronto tu quejido,

la pasión de tu cuerpo llego en tempestad,

mientras que mis manos buscaban lo elegido,  

para hacerte mía, solo mía y a plenitud.

 

No sé si era sueño, o quizás una fantasía,

porque luego te vi envuelta entre mis sábanas,

mi cuerpo ardiente vibraba de alegría,

mientras tus lamentos ahogabas en lágrimas.

 

Hoy que te has marchado y solo me he quedado,

hoy solo son recuerdos de aquel amor florido,

atrás quedaron nuestras tardes de amor apresurado,

y hoy traigo a mi memoria, todo lo vivido.

 

Sé que no has olvidado nuestra pasión aquella,

que aún sientes en tu cuerpo toda mi explosión,

tu cuerpo ardiente avivó mi tarde bella,

y todos mis deseos se cumplieron con emoción.

 

Por eso es que aguardo siempre tu llegada,

por eso es que busco tu cuerpo entre mis manos,

has dejado huellas en mi pecho mujer enamorada,

de todas esas tardes de ese amor que vivimos.

 

Vuelve te lo pido, mi cuerpo aún te espera,

mis sábanas frías también aguardan por ti,

vuelve cuanto antes, no dejes que esto muera,

pues toda mi pasión lo estoy guardando para ti.