Ha pasado el tiempo y yo vivo esperándote,
al orto del sol y al inicio de cada atardecer,
aunque tú no creas, pues yo sigo amándote,
aunque mis cuitas de amor me hacen padecer.
pero me aviva siempre tu recuerdo y tu amor,
te busco en las calles entonando nuestra canción,
y vuelvo a esperarte otra tarde con dolor.
que llegaras hacia mí, trayéndome tu pasión,
tu mirada sedienta de amor, vivo aguardando,
y los latidos de mi corazón se llenan de emoción.
las rosas de aquellos tiempos marchitas están,
mi cuerpo esta hambriento, mis pasos cansados,
y todas tus caricias son recuerdos que vienen y van.
que fue mudo testigo, de nuestro gran amor,
muy solo hoy me encuentro, buscando una mano,
que pueda acompañarme en este gran dolor.
tú te fuiste muy lejos donde no te puedo hallar,
tan solo me acompaña mi alma enamorada,
y un corazón ardiente que no se cansa de esperar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario