FM
Recuerdas aquella tarde cuando tu
venias,
con tu paso garbosa de una bella
dama,
tus labios me brillaban tu boca
hacia muecas,
y era tan difícil creer que tú me
amarías.
FA
Mi paso iba acorde al aire del
momento,
tus ojos me envolvieron con tanta
ansiedad,
yo quise un instante sacarte de
mi pensamiento,
pero no pude, porque tú eres mi
felicidad.
FM
Yo solo te miraba ansioso de
pasión,
tú eras prohibida y yo prohibido también,
pero no puedo negarlo entraste en
mi corazón,
que ahora yo prometo amarte sin
mirar a quién.
FA
Te espero cada tarde pensando que
te amo,
que somos fieles amantes de
noches de emoción,
mi cuerpo te extraña por eso es
que te llamo,
te digo vida mía envuélveme en tu
pasión.
FM
Hoy siento que he ganado tus
besos y tu candor,
y que en mis sábanas se esconden toda
nuestra pasión,
la gente nos murmura porque
vivimos este amor,
pero es algo prohibido, pero va
muy dentro de nuestro corazón.
Autores:
Flor Abriceño y Federico Mendo
(PERÚ)
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