Hoy invoco al
cielo tu nombre sagrado,
tu amor
sincero, mi fe y mi orgullo,
pido al Señor
que te tenga siempre a su lado,
que te guarde
siempre muy lejos del barullo
Tú, que ayer
mil besos con amor me diste,
tú que en tu
mirada me dabas amor,
hoy invoco al
cielo porque tú te fuiste,
llevándote
todo, dejándome el dolor.
Cuando yo
camino por la orilla aquella,
cuando en sus
playas mi amor yo te di,
hoy esta triste
la playa y hasta sin bulla,
porque estoy
con pena y pensando en ti.
Cuantas veces
te dije: amor, yo te quiero,
muchas veces también
escuché yo de ti,
y recuerdo con
nostalgia aquel amor primero,
que una noche
estrellada dejaste en mí.
Hoy no
encuentro remedio a todos mis males,
la flaqueza habita
y se ha posado en mí
cuando estoy muy
solo son noches fatales,
y no
encuentro sueño sino pienso en ti.
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