He vuelto de nuevo a tu nueva morada,
te veo sonriente y el viento sopla a mi corazón,
te callas y me miras mujer enamorada,
te miro y mi suspiro te llena de emoción.
El triste camposanto abriga silencio y calma,
el viento posa entonces y sopla mis oídos,
recuerdo aquellos besos que domino mi alma,
que engendro los sueños y que hoy se han ido.
Quisiera acariciar de nuevo tu figura,
llenarte de tantos besos como ayer lo fue,
pero veo que es tarde y descansa tu alma pura,
muriéndome en mi angustia, camino ya sin fe.
Tus besos aun guardan mis labios doloridos,
hay noches en que digo que injusto eres santo Dios,
pero luego despierto y están en mis oídos,
tu llanto lastimero de nuestro último adiós.
¿Amor porque te fuiste, porque vives callada?
no ves que entre tus manos, mi corazón está,
hoy siento tu partida y mi alma enamorada,
irá en tu rescate allá donde tú estés.
No me dejes tan solo, por amor te pido,
tu cuerpo inerte mis hombros han llevado,
te digo que no es tarde, no todo está perdido,
amor de mis amores hoy sufre mi corazón herido.
11 marzo 2006
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