martes, 22 de mayo de 2012

FUE AQUELLA NOCHE




Desesperada huiste para no verme,
en nuestra última noche entristecida,
aquella noche que prometiste quererme,
momentos antes que llegara mi partida

Piensa en mí cuando ahora estés a solas,
y olvida tus penas, tu afán y tus pesares,
envíame tus besos por favor sobre esas olas,
porque mi cuerpo descansa sobre mares.

Tú sabes que en mi pecho has encendido,
la llama del amor que hoy me consume,
pues tengo el corazón triste y herido,
y de tus besos tan solo su perfume.

Es tan hondo el mar donde naufraga mi alma,
y es por tu amor que ahora mi pecho flota,
yo quisiera encontrar la paz, hallar la calma,
pero tu amor desde lejos me azota.

Hoy que siento tu amor que es mi compañera,
quisiera que todo el mundo sea testigo,
podré amar a otra mujer, a otra cualquiera,
yo no podría pues mi corazón se quedó contigo.

Es por eso mi amor, que al separarme,
que fue aquella noche nuestro testigo,
de toda tu pasión que pudiste entregarme,
ahora estoy lejos de ti, pero tú estás conmigo.


No hay comentarios.: