No he sentido
dolor tan fuerte
en mi alma,
como hoy lo sentí,
sentada tú,
mirando tu suerte,
y yo viviendo
a la deriva sin ti.
Te vi tan
triste, sola y callada,
mirando entre
las flores la esperanza,
tienes el
alma rota y desolada,
tienes sed de
amor y de venganza.
Porque no
puedo encontrar en tus ojos,
la alegría de
aquellos años transcurridos,
donde está tu
encanto, esos labios rojos,
dime donde
están tus años dorados.
Por qué te
cobijas en la soledad,
y en ella
quieres tu formar tu nido,
no lo
intentes por favor, es vanidad,
si sabes que
siempre te he querido.
No más esa
mirada tan triste y vaga,
no más esa sonrisa
forzada y con dolor,
no sabes que
el amor con amor se paga,
algún día
también te llegará el amor.
Pero no
quiero verte triste y sentada,
cogiéndote el
rostro, fingiendo estar viva,
no es tarde
para amar bella encantada,
vives en mi
corazón, como alma cautiva.
Pero que
dolor verte allí con tu herida,
tú sin
entenderlo y yo buscando tu mirada,
despierta de
ese sueño, sonríele a la vida
entrégale al
amor, tu alma enamorada.
Ya no más
tristeza en tu débil corazón,
entrégame tu
alma cautiva y enamorada,
te juro que
en el amor existe el perdón,
pues cuando
hay amor todo se olvida.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario