Te busco
en mis recuerdos cada día,
y cada día una vez más, intento olvidarte,
tus palabras de amor me llenaron de alegría,
pues al creer en ti, empecé a amarte.
Me dijiste: que ibas llevando un gran dolor,
y llenándote de amor te amé sin medida,
pues en mis labios encontraste el sabor,
de mis besos que fueron curando tu herida.
Ese día abriste a mi corazón su puerta,
y me envolví en tus brazos un atardecer,
hoy esa ilusión de amar la tengo muerta,
mejor ya no vuelvas, pues voy a padecer.
Fue aquella tarde de amor que fue testigo,
de lo que te entregué mi amor y mi pasión,
en mi pecho amante tú buscaste abrigo,
fue aquella noche que me robaste el corazón.
Tuve miedo que con el tiempo llegue el olvido,
y todas mis ilusiones maten a mi corazón,
pues al llegar la mañana, ya te habías ido,
hoy esos recuerdos me dan toda la razón.
Ahora es tarde y no hay que lamentarnos,
si todo lo vivido fue lleno de pasión,
sigamos este camino, juntos o separados,
tratando cada día curar nuestro corazón.
y cada día una vez más, intento olvidarte,
tus palabras de amor me llenaron de alegría,
pues al creer en ti, empecé a amarte.
Me dijiste: que ibas llevando un gran dolor,
y llenándote de amor te amé sin medida,
pues en mis labios encontraste el sabor,
de mis besos que fueron curando tu herida.
Ese día abriste a mi corazón su puerta,
y me envolví en tus brazos un atardecer,
hoy esa ilusión de amar la tengo muerta,
mejor ya no vuelvas, pues voy a padecer.
Fue aquella tarde de amor que fue testigo,
de lo que te entregué mi amor y mi pasión,
en mi pecho amante tú buscaste abrigo,
fue aquella noche que me robaste el corazón.
Tuve miedo que con el tiempo llegue el olvido,
y todas mis ilusiones maten a mi corazón,
pues al llegar la mañana, ya te habías ido,
hoy esos recuerdos me dan toda la razón.
Ahora es tarde y no hay que lamentarnos,
si todo lo vivido fue lleno de pasión,
sigamos este camino, juntos o separados,
tratando cada día curar nuestro corazón.
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