AMOR FICTICIO

 

Regresábamos felices de una tarde de amor,
la ciudad muy tranquila aceptó nuestra visita,
la tarde nos brindó, alegría, vino y mucho calor,
besos que iban y venían sellando nuestra cita.
 
Yo te sentí muy feliz y amarnos prometimos,
pues no quería partir, era un lugar divino,
había paz, estabas tú y felices estuvimos,
pero llego la tarde y la alegría en mí termino.
 
El vino hizo efecto haciendo que la razón perdiera,
promesas hoy olvidadas que escuchó el Creador,
ibas a mi recostada observando la pradera,
y mi mano te acariciaba llenándote de amor.
 
Descansaste tu mano en mi pecho por un instante,
y al sentir el calor que por mis poros emanaba,
lo retiraste, afligida, tierna, dócil y elegante,
mientras mi mano sobre tu volcán se posaba.
 
Era suave tu piel al sentir tu botón en flor,
mi mano sostenía tu volcán con ternura,
mi boca selló tus labios entregándote mi amor,
esa tarde fui feliz al contemplar tu hermosura
 
Como poder olvidar cuando oprimí tu encanto,
tal vez me lo regalaste con pena y sacrificio,
hoy vuelvo a extrañarte y veo caer mi llanto,
fue una tarde de amor, de un amor frágil y ficticio.
 
Chimbote 26/09/23