Dueto de Flor A.O. & Federico Mendo
Autor: Flor Abriceño & Federico Mendo
FLOR
Era mayo y los días transcurrían,
mi vida pesarosa a cuesta llevaba,
la esperanza y mis sueños se huían,
esperando yo vivía algún día tu llegada.
FICO
Recuerdo aquel día que apresuré mi paso,
tratando de alcanzarte y poder hablarte,
yo siempre te miraba y tú no me hacías caso,
tenía en mi alma, mil ansias de amarte.
FLOR
Yo siempre te miraba pero bajaba la mirada,
tenía mucho miedo que tú te percataras,
más cuando tú me hablaste, me sentí ilusionada,
y viví enamorada con todas tus palabras.
FICO
Quizás no me di cuenta pero esa es mi verdad,
llegue amarte tanto creyendo que serias la eternidad,
pues tú eras mi alegría, mi encanto y mi felicidad,
yo nunca había pensado vivir en tanta vanidad.
FLOR
Condenada estoy amarte así de esa manera,
tan solo por unas horas y luego verte partir,
son sueños, son pasiones, todo fue una quimera,
te dije que te amaba y hoy, ya puedo morir.
FICO
Amarte fue pecado y los dos somos culpables,
de noches tan intensas que recordando estoy,
seguro que la gente dijo: ellos son amantes,
pero hoy tú ya has partido y solitario voy.
FLOR
Yo sé que algún día me llevará la muerte,
y solo los recuerdos partirán junto a mí,
no llores te lo pido, busca otra mejor suerte,
porque aunque no me tengas yo viviré en ti.
Era mayo y los días transcurrían,
mi vida pesarosa a cuesta llevaba,
la esperanza y mis sueños se huían,
esperando yo vivía algún día tu llegada.
Recuerdo aquel día que apresuré mi paso,
tratando de alcanzarte y poder hablarte,
yo siempre te miraba y tú no me hacías caso,
tenía en mi alma, mil ansias de amarte.
Yo siempre te miraba pero bajaba la mirada,
tenía mucho miedo que tú te percataras,
más cuando tú me hablaste, me sentí ilusionada,
y viví enamorada con todas tus palabras.
Quizás no me di cuenta pero esa es mi verdad,
llegue amarte tanto creyendo que serias la eternidad,
pues tú eras mi alegría, mi encanto y mi felicidad,
yo nunca había pensado vivir en tanta vanidad.
Condenada estoy amarte así de esa manera,
tan solo por unas horas y luego verte partir,
son sueños, son pasiones, todo fue una quimera,
te dije que te amaba y hoy, ya puedo morir.
Amarte fue pecado y los dos somos culpables,
de noches tan intensas que recordando estoy,
seguro que la gente dijo: ellos son amantes,
pero hoy tú ya has partido y solitario voy.
Yo sé que algún día me llevará la muerte,
y solo los recuerdos partirán junto a mí,
no llores te lo pido, busca otra mejor suerte,
porque aunque no me tengas yo viviré en ti.
Autor: Flor Abriceño & Federico Mendo
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