Ayer te he visto muy triste por la tarde,
sentada como antes al pie de tu jardín,
y al mirarte sentí que aún mi herida arde,
la herida que te dejé antes de partir.
Hoy te veo inquieta, porque me estás buscando,
y sé que hallarme ahora, tú nunca ya podrás,
el amor que te ofrecía , ahora ha sido burlado,
pues tan solo para ti, fui un juego y nada más.
No me culpes de todo lo que te haya sucedido,
pues lo hecho está, ya no tiene remedio,
aunque digas – que de tu amor yo me he corrido,
ten siempre presente que nada te he ofrecido.
Yo te dije que amarte, yo ya no podía,
y loca tú, tus besos me ofrecías,
porque fui para ti el hombre que más querías,
no sabiendo que mi corazón ya no sentía.
Hoy te entristeces al saber que te he dejado,
y dices que perdiste tu tiempo conmigo,
yo guardaré en secreto todo lo vivido,
y tal vez me permitas seguir siendo tu amigo.
Yo no me burle de ti, ni de tu cariño,
hice lo mejor, pues quise tu mejor destino,
jugué contigo como lo hace un niño
cuidando siempre ir por un buen camino.
Hoy yo quiero para ti la mejor suerte,
y no dejes nunca de vivir a tu manera,
ya no llores, se valiente y muy fuerte,
pues nunca te di amor, fue solo una quimera.
Y te pido por favor que ya no insistas,
que dejes descansar a mi noble corazón,
busca quien te amé, pues tú lo necesitas,
aunque sé que llorando estás, te pido perdón.
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