Señor
de nuevo estoy aquí meditabundo,
porque
de nuevo hablando están de tu pasión,
tú
moriste Señor por salvar este mundo,
pero
hay humanos que no tienen corazón.
Quizás
fui yo quien clavo tus manos,
o
el que te escupió al rostro aquella tarde,
perdónanos
Señor, somos humanos,
pero
hoy por ese dolor, mi corazón arde.
Quien
si no tú Señor, rey de reyes,
quien
con tanta misericordia, tu cuerpo entregaste,
tú
Señor, que trajiste nuevas leyes,
hoy
te pido perdón, por lo mucho que nos diste.
Quizás
muchos así como yo no escucharon tu voz,
ni
el llamado que hiciste a esta humanidad,
hoy
eres el Señor Todopoderoso, eres la luz
por
la cual andamos, llenos de felicidad.
Ya
no otra crucifixión Señor, de que valdría,
ya
no Pilato ni Caifás, ni sanedrín, ni judíos,
es
tiempo de gloria, de amor y de alegría,
hay
que olvidar aquellos tiempos de estíos.
Hoy
con tu amor mi vida has salvado,
algún
día Señor tu reino yo gozaré,
gracias
mi Dios, porque tú si me has amado,
gracias
mi Dios, porque a ti solo amaré.
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