A veces el
corazón sufre más de lo debido,
pero es terco mi corazón y no puede olvidarte,
pero es terco mi corazón y no puede olvidarte,
eres mi
pasión, también mi sueño indebido,
por eso es
que nunca dejaré de amarte
No sé hasta cuándo serás mi martirio,
y duermo en
la noche pensando en tenerte,
y tanto
soñarte se vuelve en delirio,
pues no tengo fuerzas para seguir sin verte.
Por eso te pido que me dejes mirarte,
y tener en mis manos tu amorosa alma,
deja tu cuerpo al lado mío para sentirte,
pues no tengo fuerzas para seguir sin verte.
Por eso te pido que me dejes mirarte,
y tener en mis manos tu amorosa alma,
deja tu cuerpo al lado mío para sentirte,
déjame
acariciarte para vivir en calma.
Déjame que
sienta mis labios tus besos,
déjame en la
tarde pronunciar tu nombre,
déjame en la
soledad elevar mis rezos,
déjame pues a
solas, llorar como hombre.
Déjame que
empuñe en mis manos tu afecto,
y que mis
ojos tiernos no te vean partir,
pues este
amor a ciegas es un gran secreto,
que irá con
nosotros hasta el morir.
Me dices
entonces que debo dejarte,
que callen
mis versos y que llegue la noche,
que me marche
entonces y vuelva a soñarte,
y el recuerdo
quede cerrado con broche.
Pero déjame
amor que te siga amando,
como lo hice
desde el momento que te conocí,
hoy mis
labios te nombran y sigo pensando,
que nunca podré, yo vivir sin ti.
Qué más puedo
decirte ¡oh! amada mía,
si te extraño cada día cuando tú no estás,
si te extraño cada día cuando tú no estás,
que es grande
mi cariño y eres mi alegría,
por eso te digo:- amor - ¿cuándo volverás?.
por eso te digo:- amor - ¿cuándo volverás?.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario